Justo allí, donde la lengua comienza a flaquear, donde el antes era fácil y el ahora cruel juez. "Nada es tan simple, nada suele llenar el silencio, el eco del vacío del callar a la mitad del ser"
Con el nervio invasor de un trote moribundo y sin nada que decir cuando la vida te habla al oído y termina por morder.
Todo es tan distante e inmediato, serán las palabras pasajeras, las nubes sin condición; serás por siempre mi estrella y yo algún día el por siempre, hoy.
Entendiendo que hay tanto de que hablar, tanto que contar; el puerto aún me espera, la ola inquieta reescribe mi nombre en la arena, y serán las palabras que revolotean en mi cabeza las que aún no logro ahogar.
Seremos por lo que callemos, serás por las promesas y el quizas, seré aquel que deja a medias las ideas, seré el guardián del sentimiento , nunca volveremos a mirar atrás.
miércoles, 11 de diciembre de 2013
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