domingo, 6 de abril de 2008

Conversación incómoda...

¿Quién te dijo que me soltaras?

El tiempo.

¿Y desde cuando traes reloj?

El biológico.

No cuenta, y creo que no lo sabes leer.

Entonces mi mano hormigueante me pidió soltarte. Me duele.

Y cuando quererme no te ha lastimado?

Tal vez me estoy cansando de quererte a ese costo.

Pero tú no te cansas y yo no soy mortal. ¿Y aún así me sueltas?

Tal vez sea mi miedo jalando mis manos.

El miedo siempre te ha obligado a abrazarme.

Tal vez sea que no te callas.

¿Qué tiene que ver el audio con el acto? En ese caso mejor cúbrete los oídos.

¿Por qué tanto miedo a que te suelte?

Por que te darás cuenta.

¿De qué?

De que soy yo la que necesito de tu abrazo...





Bueno. La verdad es que quiero cambiar el brazo.

Y la verdad es que no quiero por que yo estoy cómoda así.






Y la verdad es que no te iba a soltar.


Y de verdad yo no te iba a dejar hacerlo.

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