Sí... sí, aunque ustedes no lo crean la oficina permite ciertas libertades entre ellas tiempo para aplicar el ocio en ciertos grados.
Y no crean que hay mayor problema. Uno le grita a su jefe, voy por un cigarro, y sale y fuma; se muere un poquito y regresa. Yo le grito voy a bloggear, y ella dice, no te tardes, ¿quieres una galletita?
Ok, tal vez no sea así. Pero a quien le importa.
El día de hoy quiero comentar, que si no hubieran tantas horas muertas yo podría salir a las 3 de la tarde, hacer deporte,leer otro libro, cenar, y dormir 8 horas.
Después por el sobrado tiempo, me daría tiempo de socializar, hacer amigos (saludos a mis amigos a propósito), conocer gente, y de ahí hasta encontrar pareja. Pareja-novia-futuraesposa-prometida-esposadeadeveras hasta que el título cambié a madre de mi hijo, madre de mis hijos, abuela de los nietos, cenizas en la hurna.
Después de mi maravillosa y eficiente vida, pordía dedicar mi vejez para escribir esto...
Pero ok, no lo hice, y por eso saldré a las 6. Socializaré la mitad, tal vez no duerma, y viva como al doble de velocidad, me de un paro cardiaco y termine a lo más arrejuntado a una mujer.
Ven cuanto los quiero queridos lectores...
Regreso a trabajar... que quiero irme temprano.
miércoles, 28 de marzo de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario